Eruca Sativa en Club Paraguay
Eruca Sativa volvió a su ciudad natal el viernes 25, luego de un año: presentaron temas nuevos, el público pogueó los clásicos de siempre, y dejaron en claro la necesidad de arte en tiempos enrevesados.
Texto: Luana Iluminatti
Fotografía: Nany Palazzini

Con fanáticos aún sentados en la tan característica Cañada, a las 20 en punto comenzó una noche que ya pronosticaba cómo terminaría: a puro rock, con mucha manija y ganas de más. Les encargades de dar inicio fueron Lava Andina, banda de rock cordobesa que inició a principios de 2022 y tienen disponible su EP titulado “!!!” en todas las plataformas digitales.
Con un nuevo público -para Lava- y sumamente atento, presentaron las canciones que integran el EP, además de dejar entrever sus nuevas producciones: temas como Sueño y Miradas vienen siendo trabajados hace algunos meses, esperando salir a la luz pronto.

La ansiedad se hacía cada vez mayor: a las 21, Eruca aparecería en el escenario de Club Paraguay. Para calmarla -o aumentarla fuertemente-, Lava Andina cerró la previa del show con su single Cansada, no sin antes recordar la importancia de defender lo que es nuestro: la Universidad Nacional de Córdoba, la educación pública de nuestro país. Los fanáticos, festejando la iniciativa, aprovecharon para poguear con la consigna de pensar de qué están realmente hartxs.
A pesar de ser la primera vez que esta banda compartió escenario con Eruca Sativa, supo fusionarse perfectamente con sus seguidores. Y es que, como mencionaron en un momento de la noche, Lava Andina nació gracias a ser seguidores del consagrado trío. Las influencias de los discos Blanco y Es se ven reflejados: el público acompañó cada canción sabiendo que hay rock cordobés para rato.
Su proyecto es finalista en los premios CIEYA. Se puede votar como Banda Revelación Rock del Año.
A medida que pasaban los minutos, los cuerpos fueron apretándose cada vez más contra la valla. La cercanía y la conexión público-Eruca se percibió de manera intensa durante las dos horas que duró el recital, pero posiblemente el espacio le quedó chico a la banda que ya lleva más de 15 años arriba de los escenarios.
Con un gran juego de luces y pantallas que acompañaron de principio a fin, Lula Bertoldi, Brenda Martin y Gabriel Pedernera sorprendieron a quienes miraban desde abajo: presentaron Esto no es amor, tema que forma parte del nuevo disco que saldrá al mundo dentro de poco. Detrás, podían leerse algunas estrofas para que la gente acompañara a coro al que, sin dudas, será un hit.
“Córdoba, qué lindo volver”

Expresó Lula con éxtasis. Las raíces de Eruca estaban dentro de Club Paraguay: con sus familias del lado derecho, incluso niñes acompañando, la emoción se sintió hasta la última canción. Agradecidos, siempre, por las oportunidades y por el sostén.
Banderas flameando, más adelantos del nuevo disco que promete mucho y un público acalorado, hicieron que la noche fuera intensa. Inolvidable, brindándole felicidad a una comunidad fiel que sigue a Eruca donde vayan. En el medio del show, la gente enloqueció con los solos de bajo de la fantástica Brenda, en temas como Sola en los bares, e incluso con un Gabriel que dejó de lado su batería para acompañar con guitarra en Somos polvo.
Con piel de gallina y sentimientos a flor de piel, tampoco faltó Creo, en donde tanto público como banda supieron transmitir su efervescencia con algunas lágrimas visibles. Es que, en tiempos donde todo parece estar pausado y lleno de incertidumbre, Eruca es un salvavidas.
Su mensaje, desde siempre, es político. No importa la ciudad o la provincia en la que se encuentra, el trío deja en claro ideas que parecen tener que repetirse incansablemente, no dando por sentado nada: por un lado, con el místico Para que sigamos siendo y los puños bien marcados, tal como dice su letra, recordaron en pantalla que los desaparecidos de la última dictadura cívico-militar son 30.000. El paso del tiempo no es relevante: memoria, verdad y justicia como lema.
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Por el otro, hicieron hincapié en la urgencia y la necesidad de defender la educación pública, gratuita y de calidad. Eruca, una vez más, tomó dimensión de lo que significa tener un micrófono en mano: comunicar para el pueblo, para compartir ideales, para dejar en claro qué cosas no tienen que volver a decirse. Ni siquiera, a cuestionarse.
No caben dudas de que Lío, su próximo single a estrenar el 21 de noviembre, será un reflejo de la realidad en la que estamos inmersos. De hecho, ya el nombre da un adelanto: desorden, ruido, caos. Eruca Sativa levanta la voz, y su público quedó preparado para escucharlos.











