Irmanas presentó “No Me Digas Nada Excepto:” en Pez Volcán
Texto: Luana Illuminati
Fotografías: Matías Egea
El sábado 30 de noviembre Irmanas presentó su primer disco “No Me Digas Nada Excepto:” en Pez Volcán. La unión, el arte interdisciplinario y la amistad: cómo se vivió la fecha con artistas invitadxs, un público eufórico y la certeza de que la salida es colectiva.
Con un pasacalles sobre la Cañada que dejaba entrever la no-presentación del disco. Como anunció repetidamente la banda cordobesa formada en 2022, Irmanas presentó “No Me Digas Nada Excepto:”, su primer álbum ya disponible en todas las plataformas digitales. El título de no-presentación fue una forma de chiste para invitar a la gente, ya que las canciones forman parte del éter cordobés desde hace rato.

La No-presentación
Ahora, ese gentilicio trascendió el centro del país para ser parte de cada rincón personal. “No Me Digas Nada Excepto:” ya forma parte del aire, un aire que se respira con nostalgia, alegría y la esencia misma de Córdoba.
El escenario elegido para la ocasión fue el emblemático Pez Volcán, un lugar testigo de su evolución desde los primeros pasos de la banda. Allí, en sus inicios, cuando el disco aún no alcanzaba la sonoridad que hoy podemos disfrutar, los covers también formaban parte de sus listas. El sábado, el club de arte se llenó de energía, con más de 200 entradas anticipadas agotadas
A las 21.30, el músico y artista visual, Tobeco, dio inicio al show presentando siete de sus temas propios con su voz y su teclado, como “Amuralladas”, “Halo brío de oro” y “Lluvia corta”. Lxs espectadorxs se encontraron en un espacio acogido y melancólico, preparándose para la nostalgia que sabían continuaría pronto.
A las 22.25, con un Pez Volcán ya apretado y bastante ansioso, a través de una pantalla de plástico, comenzó la no-presentación. Un pequeño vlog de las músicas en sus horas de grabación, de maquetación y de descansos también; donde se vio reflejado el trabajo detrás del disco. Y dejando más que claro que Irmanas no son solo las seis personas que se suben al escenario (Delfina Ferrari, Paz Aravena, Emilia Di Pasquale, Constanza Lemmeh, Estefanía de la Vega y Paz Ellena), sino que son y existen gracias a la comunidad que tienen detrás: La Casa Mutante.
¿Quién o qué es la Paraguaya?
Luego de las risas y los gritos entusiasmados que el vlog causó. La banda entró en escena con el primer tema del álbum “Nqv” (intro) seguido de “Nada que ver”. Pero la atención no estuvo puesta solo en ellas: la famosa Paraguaya hizo su aparición durante toda la noche; en un inicio, haciéndose notar únicamente con su voz, interactuando con las músicas que estaban en el escenario. Hacia el final del espectáculo, durante “Te están hablando a vos”, la sorpresa llegó cuando, desde la terraza del Pez, reveló su imponente figura.

Con su cabeza gigante de papel, ojos diminutos y cabello celeste, la Paraguaya no solo robó risas. Acaparó flashes de cámaras, mientras danzaba al ritmo de la música y las luces que se dirigían hacia su presencia inconfundible. En cada show de Irmanas, ella se convirtió en un ícono querido, una Irmana más que se espera con ansias.
La sorpresa y la emoción también se sintieron de forma constante: la gente presente conocía el álbum de inicio a fin. E Irmanas, estando en escena, no podía creerlo siquiera llegando al último tema. El desconcierto fue total en “¿De qué color son los besos?”, cuando el público comenzó a gritarlo de manera efusiva y, muchxs, con ojos llorosos. La canción está número 1 en su perfil de Spotify: el asombro no fue para menos.
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La cantante Paz González también fue partícipe en “No me digas”, tema en el que dio voz junto a Paz Ellena. En estrofas como “aunque yo esté en otra parte, no existe algo más brillante que nosotras dos al sol” el público nuevamente demostró haberse preparado para cada letra.
Para “Canción de las Tristes”, el músico Fran Pailos fue el encargado de conmover a cada cuerpo ubicado debajo del escenario. Con el destacado chelo y solo dos ensayos previos, los sonidos se sintieron vivos, presentes y de manera visceral. Hubo intimidad, profundidad y, sobre todo, sensibilidad. El octavo tema del disco caló hondo en lxs asistentxs, quienes respondieron con aplausos y vítores.
El broche de oro fue “Irmanas”, la última canción del disco que, originalmente, cuenta con las voces de las seis integrantes más Marina Demarchi Oliveira (voz en Hechizo Animal) y Cande Gencarelli. Para la no-presentación decidieron invitar también a otras amigas que forman parte del colectivo La Casa Mutante: junto a Lara Fernández y María Luz Arpe (corista de Mercuriales y Lara Fernández), crearon dos minutos de pura ternura, emotividad y enternecimiento.
Fue un momento que se hizo fugaz pero, si lxs presentes hubiesen podido elegir, habría sido eterno; con tan solo una guitarra y diez voces la gente escuchó atentamente, intentando no estropear la magnificidad de la canción que atraviesa temas como la amistad, el compañerismo y la hermandad.
Irmanas se adelantó conociendo a su público ansioso y recargado. Por eso, luego de los 11 temas de “No Me Digas Nada Excepto:”, le entregaron a la gente tres nuevas canciones en las que vienen trabajando hace ya varios meses. “Del sur”, “Siempre nieve” y “Algo de vos” dejaron expectantes a un grupo grande que las sigue desde sus comienzos. Pero también a aquellxs que las descubrieron de manera reciente y que apuestan por el arte cordobés.
Casa Mutante
La no-presentación plasmó en menos de dos horas el trabajo colectivo. Se destacó por su enfoque multidisciplinario, donde se entrelazaron distintos lenguajes y formas de expresión. Visuales coloridas y sugerentes, vestuarios pensados perfectamente con la estética y lo reflejado en el disco. Camisas con frases de las canciones, tonos azules y blancos, maquillajes en celestes y azules, performances fuera del escenario.
Cada rama artística fue ideada de forma interconectada, en un proceso de trabajo en equipo facilitado por La Casa Mutante, un espacio de creación comunitaria entre artistas, donde las ideas se fusionan y se enriquecen de forma mutua.
“No Me Digas Nada Excepto” es el reflejo de un colectivo diverso y comprometido. Que va más allá de la creación musical para explorar lo que habita en los cuerpos y las mentes. Es un recorrido sonoro que se adentra en los pliegues del corazón roto, en las sutilezas de la amistad, en las maneras de habitar el dolor y en la intensidad de las alegrías. Irmanas no solo canta lo que siente. También lo que piensa, ofreciendo un testimonio auténtico y vibrante de las experiencias, luchas y emociones que configuran su mundo.








